Su símbolo ha surgido por ser un emperador de humor cambiante: las diferentes fases de la luna cambiaban su temperamento. Los manuscritos criptografados dicen que durante la luna llena él era un rey que protegía a su gente. Durante la luna nueva se transformaba en un temido conquistador de tierras.

Alcanzó un logro histórico, la conquista de Egipto. Su coraje y fuerza le hicieron ganarse el respeto de los antiguos dioses egipcios. Cuenta una leyenda que los gatos, animales sagrados de los egipcios, contemplan la luna hasta hoy por respeto a ese emperador.

Su receta exclusiva era usada solamente en conversaciones con los faraones. Los ingredientes tenían la protección y grandiosidad de los Dioses Egipcios. Hay rumores que dicen que aquellos pocos que tienen el privilegio de probar este sabor, tendrán abundancia y prosperidad durante varias generaciones.